Ha muerto Patrick Leigh Fermor, ese grandísimo escritor. Difícilmente voy a poder decir sobre él nada
mejor que lo que ha plasmado Jacinto Antón en su nota para
El País. Léanla, es un bello homenaje a un hombre de cultura y de acción. Un verdadero europeo, un admirador del mundo helenístico, un escritor que es capaz de transportarte a lugares lejanos en el espacio y el tiempo y convencerte de que has estado allí. Hace un tiempo
escribí una entrada sobre él. Hoy, sólo tengo ánimos para lamentar su muerte. Paddy, yo te creía inmortal. Ahora ya lo eres.
Tengo El tiempo de los regalos en mi mesita de noche, lo mejor que puedo hacer es leerlo ya y hacerle el mejor homenaje que se le puede hacer: no olvidarlo.
ResponderEliminarBesos
¡Cuánto lo siento! Se me han saltado las lágrimas. Precisamente, esta mañana, desayunando, pensaba en que, de los más de sesenta libros que llevo leídos este año, sin duda el que más me ha impactado ha sido "Mani", al que llegué después de leer "Un tiempo para callar", una joya que destila erudición, pasión, libertad y alegría de vivir. Qué pena. Menos mal que nos quedan sus libros. Es la primera vez que escribo en tu blog, pero lo sigo a diario, porque me gusta mucho. Un cordial saludo. Jo, siento esta muerte como la de una persona a la que conociera personalmente. Qué exageración. Sonia.
ResponderEliminarlittleEmily, leer "El tiempo de los regalos" no sólo será un bonito homenaje a Leigh Fermor, sino una auténtica gozada para ti, ya lo verás.
ResponderEliminarSonia, gracias por tu comentario. A mí también me ha afectado mucho su muerte. Es de esos autores que llegas a quererte como si fuesen parte de tu familia. Yo tengo pendiente de leer "Mani", es una lectura que me guardo casi como una recompensa, porque no tengo duda de que, como todos sus libros, será una joya.
Sólo la he hojeado - no la tengo en casa - pero tiene lo que parece una correspondencia de las buenas-buenas con Deborah Devonshire (últime hermana Mitford viva). Quizá es el momento de hacerse con el libro de una vez...
ResponderEliminar...traigo
ResponderEliminarsangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...
desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ
COMPARTIENDO ILUSION
ELENA
CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...
ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE CARROS DE FUEGO, MEMORIAS DE AFRICA , CHAPLIN MONOCULO NOMBRE DE LA ROSA, ALBATROS GLADIATOR, ACEBO CUMBRES BORRASCOSAS, ENEMIGO A LAS PUERTAS, CACHORRO, FANTASMA DE LA OPERA, BLADE RUUNER ,CHOCOLATE Y CREPUSCULO 1 Y2.
José
Ramón...
Cristina, yo tampoco conozco esa correspondencia, pero a juzgar por los dos personajes implicados, no me cabe duda de que valdrá mucho la pena.
ResponderEliminarJosé Ramón, original comentario el tuyo. Bienvenido.
Uno menos que nos queda. Cuando le nombraron los griegos "Caballero de la Orden del Fénix" pensé que era el nombre más bonito que había oído para una condecoración. Creo que releer "El tiempo de los regalos" es lo mínimo que puedo hacer.
ResponderEliminarGracias. No lo sabía, ignorante de mi.
Mi gratitud y reconocimiento no tienen límites. "El tiempo de los regalos" es una de mis mejores lecturas.
ResponderEliminarUn libro maravilloso. Sólo lamento que el autor se haya ido sin completar el relato de la última parte de su viaje. ¡Ahora nunca llegaremos a Estambul!
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