John F. Peto

John F. Peto
Cuadro de John F. Peto (detalle)

sábado, 4 de marzo de 2017

POESÍA EN EL CINE



Como todos los internautas que tienen a bien pasarse por estas páginas saben bien, este blog habla ante todo de lectura y de libros. Es -esa fue siempre mi intención al menos- un espacio para frikis de la lectura. Aunque es evidente que ni mi vida ni (probablemente) la de mis lectores se compone exclusivamente de lectura. Hay otros muchos campos que me interesan, y a los que dedico parte de mis horas libres, como el arte, la música o el cine, intereses que no suelen tener cabida aquí. Sin embargo, de vez en cuando surge esa rara conjunción, una afortunada simbiosis entre dos de ellos. Y en casos así, tan singulares como infrecuentes, creo que está justificado que los lectores curiosos que conforman el público de este blog tengan noticia de ello.
El cine es por lo general un buen lugar para este tipo de confluencias. Pero ojo: hay infinidad de películas que tienen como protagonista a un artista o a un escritor, pero muy pocas que sepan retratar de forma realista cómo se desarrolla la actividad creadora, ni cuál es el lugar de la literatura en su vida. Así, topamos a menudo con el tópico del genio poseído por alguna musa, que sumido en el afán creador olvida todo lo demás (por supuesto, ni trabaja ni come, aunque a menudo bebe, si se trata de alcohol) o con el escritor famosísimo que, ¡milagro!, no parece dedicarse nunca a la escritura, ocupado como está en líos amorosos a ser posible complicados.  


En Before Sunset, Ethan Hawke es un escritor... que hace poco más
que firmar libros. Nos encanta asistir a sus largas conversaciones con
Julie Delpy, pero la verdad es que podría ganarse la vida de cualquier otra cosa.

Por eso mismo, hay que saludar con alborozo una película que, por una vez, muestra a un creador modesto, sencillo y desconocido, que es capaz de compaginar su escritura con una vida, en apariencia, trivial. Que es capaz de infundir en las monótonas actividades cotidianas de su protagonista un profundo sentido poético, y de trasladárselo al espectador. Estoy hablando, por si no lo han adivinado aún, de la espléndida Paterson, la obra más reciente de Jim Jarmusch. Lectores todos: si aún no la han visto, apresúrense a verla. Eso sí, sepan que no hay acción ni persecuciones, no hay dramas tremebundos ni amores imposibles, no hay paisajes impactantes ni mansiones que quiten el hipo. No vayan a verla, se lo ruego, con una bolsa de palomitas. Déjense seducir por el encanto de la película, por el sutil humor de sus situaciones, por los poemas que escribe ese tal Paterson, conductor de autobús de profesión. Un film para paladear y para disfrutar. Por una película así no tengo reparo en saltarme mis propias normas y, por una vez (bueno, alguna  otra también), hablar de cine. Por todo esto y porque en ella aparece uno de los poemas que más me gustan de William Carlos Williams. Como aperitivo, ahí va, en versión original y traducida:

This is just to say

I have eaten
the plums
that were in
the icebox

and which
you were probably
saving
for breakfast

Forgive me
they were delicious
so sweet
and so cold

Solo para decirte

que me he comido
las ciruelas
que había
en la nevera

y que
probablemente
guardabas
para el desayuno

Perdóname
estaban deliciosas
tan dulces
y tan frías

(Versión castellana de Matilde Horne y Carlos Manzano)


Jim Jarmusch (Foto Chrysoula Artemis)
A películas como esta no les dan el Oscar. Pero si por mi fuera, lo tendría.

4 comentarios:

  1. Varias personas me han hablado muy muy bien de ella, pero aún no he ido a verla. Soy muy cinéfila, pero estoy atravesando una pequeña crisis. La guardo en la lista de pendientes, que se está haciendo casi tan larga como la de libros.

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    1. Créeme, es una película ideal para volver a congraciarse con el cine. Yo salí con una sonrisa que me duró varias horas.

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  2. me gustan muchísimo las películas que hablan de libros y/o parece que crean literatura dentro de la misma película. Antes del Amanecer, me parece maravillosa...En general la trilogía, aunque las dos primeras, son mis predilectas. En ellas hablan de libros, de literatura, de lo que escriben y/o piensan...
    Peterson también me gustó mucho...especialmente por el elogio a la lentitud, a la perdida y al reencuentro...a saber que las palabras se marchan, pero que la vida nos ofrece cauces para seguir siendo escribientes de lo que nos rodea...
    Un placer pasar por aquí. Buen día.

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