Naturalmente, reducir el arte de la escritura a una serie de reglas, y pensar que si las cumples ya lo tendrás dominado es una solemne tontería. Sin embargo, si les llamamos "Consejos de escritores para escritores" la cosa ya parece más plausible. En todo caso, Elmore Leonard está a punto de publicar un libro que se titula así, 10 reglas para escribir y, con ese motivo, The Guardian ha llevado a cabo una encuesta entre varios escritores anglosajones -entre ellos Margaret Atwood, Roddy Doyle, Richard Ford o Jonathan Franzen-, cuyos resultados merece la pena comentar. No todos han respondido, o al menos no han respondido dando 10 reglas. Philip Pullman, drástico, dice: "Mi regla principal es decir que no a cosas como esta, que me tientan a abandonar lo que es mi trabajo." Helen Simpson, por su parte, responde: "Lo más parecido que tengo a una regla es un post-it en la pared frente a mi escritorio que dice Faire et se taire (Flaubert), que traduzco para mí misma como 'Cállate y a lo tuyo'." Los demás cubren un amplio abanico de respuestas, desde las más largas y detalladas a las más concisas. Entre estas últimas, las de Richard Ford destacan por su laconismo y por su orientación práctica:
-No tengas hijos.
-No leas tus críticas
-No bebas y escribas al mismo tiempo
Y es que no todos se lo han tomado como una invitación a explicar los arcanos de la escritura (cosa imposible, por otra parte). Hilary Mantel recomienda: "¿Te tomas en serio lo de escribir? Entonces, búscate un contable." A menudo, el espíritu del autor se hace patente en sus consejos, como es el caso de la primera regla de Roddy Doyle: "No coloques una foto de tu autor favorito sobre tu escritorio, especialmente si es uno de esos famosos autores que acabaron suicidándose." O de Joyce Carol Oates, que mezcla realismo e ironía para decir: "No intentes pensar en un 'lector ideal': es posible que exista, pero él/ella estará leyendo a otro." Anne Enright, después de afirmar que "Los primeros doce años son los peores", sigue, implacable, afirmando que : "Sólo los malos escritores creen que su obra es realmente buena". Diana Athill, por su parte, ofrece un consejo fundamental -"Corta (quizás debería ser CORTA). Sólo eliminando todas las palabras que no son esenciales puedes hacer que cada palabra esencial cuente"-, tanto que el mismo aparece de una u otra forma en varias de las respuestas. Igual que el de Esther Freud: "Una historia necesita ritmo. Léela en voz alta para ti mismo. Si no suena bien, le falta algo." La conclusión que se saca de todos ellos es que el mejor consejo para escribir es, sin duda, escribir. Mucho y de manera regular. Y tener una papelera bien cerca.
Elmore Leonard finaliza sus 10 reglas así: "Mi regla más importante es una que resume las otras 10: si suena a algo escrito, lo reescribo."